Un periódico de Barcelona
El Ionkola cerró hace veinte o veinticinco años. ¿Pueden ser treinta? Le pregunto al camarero del bar donde pido un cortado e información. Pueden ser. Cambió el nombre hace mucho. Hubo un asesinato de ETA en ese bar, le digo. Mataron al dueño, Jesús García. Hoy hace treinta años de ello. El camarero ni afirma ni niega, pero su mirada y su gesto, hacia atrás en el tiempo, me dicen que sí, que lo recuerda. De todos modos a estas horas no lo encontrarás abierto. Es un bar para más tarde. Está justo al final de esta acera. Ahora se llama Edaska. Ni un GPS lo habría hecho mejor. Le doy las gracias y pago el cortado, pero él quiere saber más. ¿Para un reportaje? Sí, respondo. Un periódico de Barcelona. Me estoy acostumbrando a esa coletilla, un periódico de Barcelona. Por aquí da caché, parece.
Los comentarios están cerrados.